Los individuos son de plástica brevilínea con tendencia mediolínea, formato elipométrico y perfil craneal subcóncavo. Su alzada oscila entre 100 y 120 cm. a la cruz, con pesos comprendidos entre 125 y 175 kg. La apariencia es proporcionada y equilibrada, resultando en su conjunto muy armónicos, y aunque puedan parecer frágiles son animales muy rústicos, longevos y sobrios. Perfectamente adaptados a los suelos semidesérticos y volcánicos, se han integrado completamente al ecosistema de las islas. Vivaces, enérgicos y resistentes a las privaciones, han reportado, desde siempre, útiles servicios a la población isleña.
Las capas esenciales son la torda, en sus diversas gradaciones, pudiendo ir desde un gris claro hasta oscuro, siendo en todos modos muy dependiente de los factores ambientales incidentes: estado nutritivo, época del año, condiciones de manejo, etc, y la parda. Existen degradaciones del color en el vientre y cara interna de las extremidades, así como, en el hocico y zona orbital de los ojos ("puntos"). Son características la raya de mulo en la espalda, la banda crucial y las zebraduras de las patas .